CIUDADES ESPONJA, UNA SOLUCIÓN CONTRA LA SEQUÍA Y LAS INUNDACIONES

En estas ciudades, los edificios, plazas y calles absorben, almacenan y liberan agua de lluvia como si de una esponja se tratara. Para conseguir esto, las ciudades esponja están conformadas por una serie de infraestructuras “eco-friendly”, que permiten retener el agua de la lluvia, como por ejemplo:

• – Fachadas y techos “verdes”: las fachadas y techos de los edificios e infraestructuras de estas ciudades cuentan con la presencia de vegetación; que permite la retención del agua para consumo propio de esa infraestructura.

En estas ciudades, los edificios, plazas y calles absorben, almacenan y liberan agua de lluvia.

• – Humedales urbanos: tal y como explica el profesor Yu, estos humedales situados en pleno centro urbano, tienen una doble finalidad en función de la época del año en la que nos encontremos.
• En las épocas de lluvias torrenciales, estos espacios sirven para retener todo el agua, evitando así grandes inundaciones y permitiendo que ese agua quede almacenada de forma natural para utilizar en épocas de gran sequía.
• En las épocas de menos lluvia, estos humedales se convierten en grandes parques por los que los ciudadanos pueden caminar disfrutando del lago que, de forma natural, se crea por el almacenamiento del agua pluvial.
• – Pavimentos permeables: los suelos de las calles en estas ciudades, cuentan con un gran nivel de porosidad. Esta porosidad, permite la filtración del agua en el subsuelo, donde se acumula en pequeños acuíferos naturales.
• – Acequias: en uno de los lados de las carreteras de estas poblaciones, se instalan acequias para la recuperación del agua de lluvia que cae sobre el asfalto.